No siempre trabajar con alumnos implica reducir, quitar o simplificar. A veces es necesario adaptarse a alumnos con capacidades brillantes.
Estos son los consejos que doy para estos alumnos. Como se puede comprobar no se trata de darles más o mejor, sino, sobre todo, lo que es más indicado también desde un punto de vista educativo.
Características a introducir en el currículo:
- Favorecer material complementario creativo que amplíe el currículo profundizando y extendiendo contenidos transversales;
- Evaluar de forma flexible en la que pueda motivarse y encontrar un reto personal;
- Incrementar las evaluaciones basadas en búsquedas, investigaciones y exposiciones en las que tenga que planificar y organizarse él sólo;
- Alternar trabajo individual y grupal;
- Introducir elementos instrumentales nuevos (para la búsqueda de información, la ejecución de proyectos y actividades, lecturas adecuadas, debates y defensas orales, apoyo a compañeros, asistencia a actividades de personas más mayores, etc.).
Características a introducir en la relación personal con el alumno:
- Virtudes principales a trabajar: paciencia, humildad, amistad, equilibrio psico-socio-afectivo;
- Aspectos que no suelen necesitar potenciar: perfeccionismo, rapidez cognitiva, abstracción intelectual, búsqueda de excelencia;
Evitar:
- Dar simplemente más tareas;
- Marcarle en clase de forma excepcional;
- Competir con él intelectualmente por envidia o entrando en un juego de auto-afirmación;
- Comparar alumnos con él;
- Exigirle más de lo que puede o en aquello que no es adecuado a sus características personales;
- Forzarles a ser extrovertidos;
- La monotonía en las tareas simples o fáciles;